No vale la pena incluir la sinopsis del libro porque cuanto menos se sepa sobre la trama, mejor. Recomiendo que eviten leer la contraportada o la sinopsis online porque contiene grandes spoilers del primer tercio del libro. En esta reseña solo voy a comentar de forma general lo que pasa en los primeros capítulos, el resto conviene que lo averigüen ustedes.
La novela está narrada de una forma que a King le queda muy cómoda y que se repite en muchos de sus libros. Un escritor llamado Charlie Reade recuerda lo que le sucedió durante su último año de secundaria, donde conoció a un anciano bastante hosco y a Radar, una perra vieja y muy cariñosa.
En el primer tercio del libro no encontramos nada de
fantasía. Aunque King en estos primeros capítulos da algunos indicios de que
hay algo mágico en la vuelta, lo central es la relación entre el anciano señor
Bowditch, Charlie y Radar. Esto puede sonar aburrido porque son casi doscientas
páginas en las que no ocurre nada sobrenatural, pero gracias a la facilidad que
tiene King para escribir este tipo de historias en las que el protagonista
rememora su juventud, no resulta para nada pesada; de hecho, fue la parte que
más me gustó de todo el libro.
Al final de esa primera parte (y por motivos que no voy a
comentar en esta reseña), Charlie viaja a una tierra donde la magia existe y
una terrible maldición está afectando a todos los habitantes de ese otro mundo.
King describe de forma muy linda esta tierra de cuento de hadas que contiene claras referencias a muchas historias con las que todos crecimos. A pesar de esto, me pareció que al mismo
tiempo se quedó algo corto con el desarrollo porque el mundo se
siente demasiado vacío y sin vida. Entiendo que esto último se debe a la
maldición que encuentra Charlie, pero de todas formas resulta muy raro que el
protagonista se cruce con tan pocas personas a lo largo de su viaje. Tampoco se
trata de una novela de fantasía épica donde se suele contar hasta el último de
talle de una piedra con tal de lograr una mejor construcción del mundo, ni tampoco pretendía que
King hiciera esto; el problema es que un montón de cosas interesantes de la tierra de cuento de hadas quedan en
el aire o sin resolver, o Charlie aprende sobre ellas gracias a extensos relatos de otros personajes que se sienten algo forzados.
El otro gran problema que tuve con la segunda parte fue que
Charlie como narrador todo el tiempo está diciendo que los verdaderos cuentos son oscuros y tenebrosos, muy diferentes a los que nos cuentan
nuestros padres cuando somos niños. Esto hace pensar que King le dará su toque
macabro a su versión de cuento de hadas e incluso crea cierto ambiente turbio con
referencias muy claras a historias de Ray Bradbury, H.P. Lovecraft y los
cuentos de los hermanos Grimm, pero lamentablemente el desarrollo que le dio a
todo esto resulta decepcionante.
Uno de los puntos fuertes de King es la construcción de personajes, donde hasta personajes secundarios se sienten reales y tienen trasfondos complejos. En este libro, con las excepciones del señor Bowditch, Radar y el propio protagonista, el
resto de los personajes que encuentra Charlie a lo largo de su aventura no me
parecieron nada memorables. Sobre la mitad del libro Charlie se encuentra en
una situación donde interactúa con varios habitantes del otro mundo, pero para mí todos fueron personajes intercambiables y acartonados, no me interesó en lo más mínimo saber quiénes
eran ni qué les iba a pasar.
Algo que suele criticársele a King son sus finales y por desgracia el último acto del libro me pareció demasiado apurado y una
decepción. A mi parecer King cae en la contradicción de decir todo el tiempo
que este no es un cuento de hadas como los demás, pero termina cayendo en todos
los clichés y lugares comunes que tienen este tipo de historias.
Tampoco todo es tan malo. A pesar de ser un libro largo, los capítulos son bastante ágiles gracias al estilo de narración. Si ya han leído otros libros de King narrados de esta forma, estarán acostumbrados a lo que llamo el "autospoiler", esto es, que el narrador a lo largo de los capítulos adelanta algún hecho importante que va a pasar en algún momento del libro. Siempre me gusta la forma en que King hace esto porque mantiene la tensión y dan ganas de saber cómo se va a llegar a esa situación terrible que el propio protagonista destaca antes de que suceda, y también lo hace de una forma tan natural que no resulta para nada forzada.
También hay que mencionar el cuidado que tiene la
edición del libro, es realmente muy linda y cuidada. El inicio de cada
capítulo tiene una ilustración de Gabriel Rodríguez, coautor de la
excelente serie de novelas gráficas de Locke & Key. Me encanta el
estilo de este artista y las ilustraciones incluidas en este libro son
geniales.
Con Cuento de hadas King hace un homenaje a historias con las que todos crecimos y a otros grandes autores de fantasía que
fueron referentes para él. La primera parte del libro donde no hay elementos
mágicos me pareció la más sólida de toda la novela, allí es donde vemos a King
en su mejor versión, con un protagonista que nos transporta a su juventud a
partir de su relato. Lamentablemente, la parte que más expectativas me generaba me
terminó decepcionando. Al mundo mágico le falta desarrollo y, salvo un par de
excepciones, los personajes que encuentra Charlie no son nada memorables. El
tramo final de la novela es muy apurado y a mi entender rompe la promesa que
hace King en diferentes capítulos. No lo considero un mal libro, pero
ciertamente no lo recomiendo para comenzar a leer a Stephen King ni para
introducirse a sus historias de fantasía.
Conexiones con otras novelas de Stephen King:
- Un amigo de Charlie menciona que el señor Bowditch tiene un “perro monstruoso”, como el de la película Cujo. Cujo es el título de una de las novelas que integran el Ciclo de Castle Rock, donde un San Bernardo que se contagia rabia aterroriza el pueblo.
- El señor Bowditch tiene un revólver calibre 45 que Charlie utiliza durante su aventura. El talento natural de Charlie para manejar esta arma es similar a la de los legendarios pistoleros que aparecen en La Torre Oscura.
- Charlie recita parte del poema Childe Roland a la Torre Oscura llegó. Este poema de Robert Browning sirvió de inspiración a King para escribir la saga de La Torre Oscura.
- En el mundo de cuento de hadas, Charlie encuentra personas
que pueden “lanzar sus pensamientos”. La telepatía está presente en muchas
historias de King, como por ejemplo, Carrie, El instituto, El resplandor, Ojos de fuego y La Torre Oscura.
- La idea de que existen “otros mundos además de este” es el tema principal de la saga de La Torre Oscura.
- El padre de Charlie dice “largos días y placenteras noches” al igual que Roland de Gilead para saludar.